Adios a un amigo

Hoy se ha ido Víctor Gárate, un amigo muy querido. Estimado Víctor donde estés recibe este mensaje de Paz. Imagino allá en el cielo estarás revolucionando a medio mundo con tu incansable quehacer en pro de un mundo mejor. Nos dejas con mucha pena ya que te has ido en plena madurez, pero estamos seguros que en tú nueva vida estarás descansando de los avatares de este mundo. Chaooo amigo mío, hasta siempre, estarás en mis recuerdos.

Algo de nuestros antepasados Mapuche

A la llegada de los españoles, los Mapuche ya ocupaban la zona entre el Itata y el Toltén. Se autodenominaban Mapuche, Mapu: tierra y Che: gente. Es decir, gente de la tierra. De ahí el fuerte sentido de pertenencia a la tierra, la Ñuke Mapu (Madre Tierra), que tiene el pueblo mapuche. Los españoles les dieron el nombre de araucanos, una designación del lugar en donde ellos fundaron el fuerte. Cabe destacar del pueblo mapuche, no solo su tradición de pueblo guerrero, sino igualmente su rica producción artística en campos tan variados como la literatura, la pintura, la escultura, el teatro y la música, producción que, sustentada en la pertenencia a una tradición ancestral y a una profunda relación espiritual.
La mujer mapuche era el soporte económico de la comunidad araucana, asumía la mayor parte de las tareas, como la crianza de los niños, el cuidado de la casa, la preparación de los alimentos, el vestuario y las siembras. Un padre que tuviera varias hijas podía sentirse afortunado de contar con abundante mano de obra. Todavía es posible observar en el campo, el abnegado trabajo de la mujer mpuche.
La religión de este pueblo poseía un claro sentido animista, es decir, la atribución de espíritus a la naturaleza animada o inanimada, capaces de generar tanto el bien como el mal. Para estar protegido, el mapuche invocaba al Pillán, Dios Supremo y creador de todas las cosas, que moraba en los volcanes.

La Aldea Cultural

Por el trabajo de mi tesis, tuve la suerte de desplazarme a Curarrehue, situado casi en la frontera con Argentina, más allá de Pucón. Y de lo que recorrí, les muestro la foto de la Aldea Cultural, una más que interesante propuesta para reunir lo que es cultura en un pueblo alejado de las grandes urbes y sin mucho dinero que invertir. El espacio que se da a las exposiciones es increible y entrar en él y escuchar música mapuche de fondo trae sensaciones difíciles de olvidar. Tuve la suerte de ver una exposición en cuero, maravillosa. Los invito a que cuando visiten la Región de La Araucanía, no dejen de pasar por Curarrehue y su Aldea Cultural.

Aquí una muuy buena noticia para el cine chileno, reproducida de Emol, tiempo libre. Ganamos con dos películas.TOULOUSE, Francia.- La película "La sagrada Familia" del chileno Sebastián Campos, fue galardonada este sábado con el Gran Premio Flechazo del 18 Festival Encuentros de Cines de América Latina de Toulouse, anunció el jurado.
El jurado otorgó una mención especial a la película peruana "Madeinusa" de Claudia Llosa.
El Premio Descubrimiento, destinado a primeras obras, recayó en "La suerte está echada", del argentino Sebastián Borensztein, una comedia disparatada sobre cómo enfrentar los males de la vida con optimismo.
El premio del Público fue para la película chilena "En la cama", de Matías Bize.
"La sagrada familia", primer largometraje de Campos, fue filmada en sólo tres días, que corresponden a los tres días de Semana Santa en que transcurre la narración.
En ese lapso, una familia burguesa se reúne para pasar las vacaciones de Semana Santa en su casa de vacaciones a orillas del mar. La llegada de la novia del hijo, desprejuiciada y manipuladora, hace surgir los conflictos acallados por las formalidades.
En "Madeinusa", Claudia Llosa pinta una aldea perdida de los Andes, Manayaycuna. En Semana Santa, durante tres días el pueblo está de fiesta. Desde el viernes hasta el amanecer del domingo, Dios está muerto y no puede ver nada, de manera que todas las trasgresiones están permitidas.

Regreso

Hola amigas y amigos, de regreso a la civilización despues de unas vacaciones soñadas en el Parque Nacional Huerquehue, la única lata es que el torpe, por no decir otra cosa, no puso bien el rollo en su vieja máquina fotográfica y CERO FOTOS, será para la próxima. Bien ya vendrán más comentarios.